| “La poética de Paz es una antropología” | |
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| Escrito por JORGE SIFUENTES CAÑAS | |
| Jueves, 07 de Agosto de 2008 00:00 | |
| CUERNAVACA.
Conociendo las obras del hombre, se conoce al hombre.
Ésta
es la tesis principal del libro Lo desconocido es entrañable.
Arte y
vida en Octavio Paz, editado por Jus, que el escritor Rafael
Jiménez
Cataño presentó el martes pasado en la Biblioteca Miguel
Salinas de la
Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), con los
comentarios
de Juan Manuel Escamilla, Gabriel Reyes, Javier Sicilia y el autor. La idea de este volumen surgió como un repensamiento de carácter filosófico, dada la formación de Jiménez Cataño, tras notar la profundidad antropológica en las obras de Octavio Paz, al entrar en contacto más serio con el poeta. “Esa es la esencia que trato de reflejar en este libro, que la poética de Paz es una antropología. El arco y la lira es una poética, pero es también una antropología, ahí nos dice muy bien cuál es la condición humana y qué es el hombre. En este sentido, la idea principal que resume el libro es que la experiencia poética es una revelación de la condición humana”, dijo el autor en la charla con La Jornada Morelos. El interés de Jiménez Cataño en Paz surgió en su estancia en Italia, en donde ahora radica, luego de su tesis doctoral y su labor como profesor asistente, con la intención de mantener un vínculo con México que le permitiera estar al día con algún tema que le significara un nivel de profundidad de pensamiento. “Luego de buscar entre varios autores, en primer lugar filósofos, encontré que Octavio Paz me permitía un horizonte más amplio que no excluía el pensamiento filosófico; además de abrirme a otras experiencias y así fue como empecé a tratar de profundizar”. En ese momento surgió aquél “golpe de suerte”, cuando a Octavio Paz le dieron el Premio Nobel y Rafael Jiménez Cataño recién había publicado un artículo en donde mencionaba abundantemente al poeta. “Me empezaron a pedir artículos para diversas revistas; de ahí salieron varios de esos ensayos que ahora están aquí. La tesis principal de este libro es: Conociendo las obras del hombre, conocemos al hombre. Es una tesis muy cercana a la hermenéutica; que de alguna manera está muy presente en mi otro libro La debilidad del poder creador, que no se refiere a algún autor, pero en este caso trato de desarrollarla en particular en Octavio Paz”. El volumen contiene 10 ensayos ya publicados en la edición de 1992 en España, “más otros cuatro posteriores y dos textos más, uno sobre la historia de esos textos y otro que es la conversación con Víctor Sosa, junto con algunos elementos añadidos como el epígrafe inicial y final, la introducción. Creo que hay una unidad, se puede considerar realmente como un libro, pero también cada ensayo es autónomo, nació autónomo, se publicó en una revista sin los demás, quizá con alguna referencia a los anteriores”. En Lo desconocido es entrañable, agregó, el lector puede encontrar la antropología dentro de una poética “y puede encontrar una antropología desglosada. Hay un capítulo que trata muy específicamente sobre la noción de esperanza, cómo Paz puede contemplar la esperanza, qué elementos nos ofrece para ir también más allá de él en lo que se puede llamar la esperanza y qué es la esperanza”. Rafael Jiménez Cataño, originario de San Luis Potosí, es profesor de tiempo completo en la Facultad de Comunicación Institucional de la Universidad de la Santa Cruz, en Roma, donde reside desde los años ochenta. Con Jus publicó La debilidad del poder creador (2006). A estas reflexiones se suman otras de índole dialéctica: Copulatio in Peter of Capua (12th Century) and the Nature of the Proposition (Berlín – Nueva York 1996), El valor unitivo de la distancia en el diálogo (Aguascalientes 2002); Wishful Thinking and Argumentation through Metonymy (Edsbruk 2004), The Role of Goodwill in Conflictive Communication (Bucarest 2007), y la recopilación Mi verdad, tu verdad (Aguascalientes 2007). En México ha colaborado en las revistas Vuelta, Istmo y Paréntesis, y en Ixtus mantuvo la columna La bendición de Babel. |